A lo largo de nuestra vida recorremos diferentes caminos, experimentamos diferentes sensaciones, descubrimos maravillas que adherimos a nosotros y dejamos nos acompañen hasta el gran cambio.
Esas maravillas nos permiten ser y expresar los que somos. No tiene porque ser aceptado por todos así que:
¡disfrutémoslo!, es nuestro mundo, solo y exclusivamente nuestro.
No es que sea gran cosa, pero es interesante reutilizar todo aquello que de otra manera acabaría en la basura. Estoy un poco escasa en estos meses, debe ser el frío de Madrid que congela las ideas, pero mejor poco que nada.